Todxs somos normales de Flor Méndez y Bel Riddle

 Título original: Todxs somos normales

Autor: Flor Méndez y Bel Riddle Editorial: Destino Genero: Realismo, drama

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Guada es asexual y siempre creyó que eso le impediría tener una relación amorosa, pero desde hace un tiempo está de novia con su mejor amiga, Mica, y aunque su relación no es perfecta, se las ingenian para ir creciendo juntas y apoyarse la una a la otra.

Una tarde, la vida de las dos cambia para siempre. Una cita inofensiva para realizar un trabajo escolar termina en una tragedia. Hay un intento de violación. Hay un asesinato. Y la decisión de cómo seguir va a recaer exclusivamente en las manos de Guada.

Normalmente, cuando leo libros de amigos y conocidos soy egoísta y tiendo a no reseñarlos. A veces creo que no puedo hacerles justicia, a veces me siento presionada a decir lo que creo que quieren escuchar, a veces realmente no sé que decir y, al existir un vinculo, prefiero no decir nada a hacer un comentario genérico o resumirlo en exactamente eso "No sé qué decir".

Pero desde el momento que abrí Todxs somos normales, supe que iba a reseñarlo. Y no solo porque las autoras nos animan a hacerlo en las páginas finales, sino porque es un libro que aborda temas que no aborda ningún otro, y visibiliza colectivos que ningún, o prácticamente ningún, libro juvenil visibiliza. Entonces me pareció importante. Tenía que dedicarle una entrada. Esta entrada. Tenía que hablarles de él.

La historia es sencilla, y si bien depara ciertos sobresaltos, no demasiadas sorpresas. El punto fuerte de este libro es el maremoto de emociones que asalta a Guada, son sus momentos introspectivos y todo el tiempo que pasa reflexionando para poder tomar una decisión muy, muy difícil.

Ese es el hilo conductor de la novela, y mi cosa favorita. Todos nos hemos sentido Guada alguna vez. Tiene muchísimos pensamientos, llega a muchas conclusiones, ha vivido muchísimas situaciones, que de una forma u otra te llegan, porque muchos los hemos vivido/pensado/sentido en nuestra adolescencia. Porque en su caso es su sexualidad, pero la mayoría de nosotros lidia con algo que nos hace sentir excluidos alguna vez.

Yo en el colegio era la rara, la que no hablaba, la que leía, la que odiaba salir, la que tenía pocos amigos. Una sola persona se burló de mí abiertamente, una vez, pero aún así siempre me sentí una extraña, el sapo de otro pozo, la outsider. Y me vi reflejada en Guada en muchísimas ocasiones. A todos los "raros", los sapos de otros pozos, los outsiders, les va a pasar algo parecido.

Las chicas hicieron un trabajo excelente retratando la vida diaria de una adolescente que siente que no encaja. Es vívido y natural. Esa fue mi segunda cosa favorita.

La narración es fluida y muy llevadera, es auténtica y fresca, realmente sentís que estás adentrándote en la cabeza de una chica. Eso hace al libro muy dinámico, pero no crean que eso lo hace simple. Es una historia cargadísima de emociones y tensión, crearon una atmósfera opresiva y oscura, incluso cruel. Definitivamente, no esperaba eso y me encantó.

Por último, muchas situaciones me hicieron sentir nostalgia y me transportaron a mi niñez y adolescencia, y no en un mal sentido. Hay muchos detalles que le agregan verosimilitud y realismo a la historia, te llega hasta de puntos que ni siquiera lo esperabas. Que ni siquiera fueron concebidos para que te lleguen. Muy bueno eso.

Una lectura muy interesante, que pone sobre la mesa una situación de la que ni Guada ni el lector van a salir indemnes.