Titulo original: The Hauting of Hill HouseGenero: Terror, suspenso, dramaDuración: 10 epis.Año: 2018
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Sin lugar a dudas, La maldición de Hill House es la serie de esta temporada.
Basada muy por encima en la novela de Shirley Jackson, nos narra a dos tiempos la vida de los hermanos Crain, quienes en su infancia vivieron durante un verano en Hill House y experimentaron allí todo tipo de sucesos inexplicables y traumatizantes.
Su estancia allí terminó en tragedia, una tragedia que no solo los separó como hermanos sino que destruyó por completo a su familia.
Pero los horrores de Hill House no acabaron con su salida abrupta de la casa, sino que los acompañaron, bajo una forma u otra, por el resto de sus vidas.
El mayor, Steven, es un completo y total escéptico. Pero aún así se gana la vida escribiendo best sellers sobre casas embrujadas, entre ellas Hill House, lo que le ha costado la relación con sus hermanos.
Shirley, es una mujer fría y distante, la voz de la razón que no cree en fantasmas y maneja una casa fúnebre, mientras intenta mantener una relación inestable con sus hermanos y lidia con distintos tipos de culpas.
Theo es la del medio y si bien siempre pareció la más dura e independiente, goza de una hipersensibilidad que la mantiene alejada del mundo y reprimiendo todas sus emociones.
Luke, se convirtió en un adicto sin escrúpulos ni salvación aparente, aunque lleva tres meses limpio en rehabilitación.
Y finalmente Nell, la melliza de Luke siempre fue el lazo entre sus hermanos, la única capaz de mantener una linda relación con todos ellos. Y sin embargo, por ser el eslabón más fuerte también es el punto más débil.
Más de veinte años después, siguen luchando por dejar Hill House atrás. ¿Pero cómo escapar de sí mismos?
Lo primero que la mayoría de nosotros supo de esta serie, fue puro marketing de ese que infla, infla e infla. "Alguien tuvo un ataque mirándola", "Da tanto miedo que causa convulsiones", "Solo se puede mirar de día y con once crucifijos" y derivados. Esas cosas siempre me echan atrás, pero era Shirley Jackson, era una versión "nueva" de mi peli preferida de terror de la infancia (La maldición, con Owen Wilson y Catherine Zeta Jones), y TENÍA que verla.
Yo no soy buen parámetro, ya que estoy muerta por dentro y rara vez una historia de terror me asusta, pero no me pareció tan terrorífica. Al contrario, al igual que el libro, no sentí que se limitara a sustos burdos y screamers, a solo pretender asustar, sino que el terror es un vehículo para llegar a algo más profundo. A algo más emocional y psicológico.
Sí, tiene sustos. Pero es más que eso. Mucho más que eso.
Los fantasmas en esta nueva versión de Hill House no solo son espectros, la culpa, el remordimiento, la soledad, el resentimiento, la locura y la muerte son monstruos mucho más aterradores y con un protagonismo mucho más voraz.
Así que sí, una aparición repentina va a incomodarte y darte palpitaciones, pero al final del día es la suma de todas aquellas sensaciones que ponen a nuestra condición humana sobre la mesa, la que hace mella, la que te provoca sentimientos muy intensos, angustia, conmoción. La que te hace pensar, la que te apela y te conmueve. Y es eso lo que hace a esta serie tan grandiosa.
La trama es genial y está muy bien pensada. No solo entremezcla pasado y futuro de una manera impactante que te mantiene siempre al borde de la silla y te eriza los pelos, sino que al final todo se conecta de una forma magistral. Esto último me voló el cerebro, es increíble lo bien que la pensaron, como todo se acopla. Te deja patitieso y sin poder creerlo. Muchas de las apariciones de Hill House tienen una respuesta, una explicación, y realmente, realmente me encanta. Un flash absoluto.
En lo personal, la serie me causó más angustia que miedo. Y por angustia lean: lloré como condenada del episodio dos al diez. Sin parar. Me resultó muy, muy, muy emocional. Me destruyó, tocó muchas fibras sensibles en mí y a la vez no podía sentir más que empatía por uno y cada uno de los Crain.
Tiene momentos muy intensos a nivel emocional. Increíble (la escena de Theo y Shirley en el auto está en mi top ten de mejores escenas del cine y la tv, de lo mucho que me pegó).
Las actuaciones me gustaron mucho todas. Realmente tiene un cast excelente (y hot as fuck, hay que decirlo).
Si tuviera que elegir, destaco a Carla Gugino, quien interpreta a Liv, la mamá de los Crain y... reina absoluta. Su interpretación es esplendida, desesperante y triste. La adoré.
También me gustaron mucho, pero mucho Elizabeth Reazer, que interpreta a Shirley, la hermana mayor y, aunque pueda ser una elección rara, Timothy Hutton, quien interpreta a Hugh Crain de grande. Me vi reflejada en ambos y me encantaron sus interpretaciones. Especialmente la de él, me resultó desgarradora y muy conmovedora.
Pero, reitero, un cast brillante. El favoritismo pasa por una cuestión de afinidad no de calidad. Todos son excelentes, todos se lucen. Los amé a todos. Pero a todos.
Sobre la trama, no es una adaptación del libro, sino que está basada y toma elementos. Pero es una historia distinta. Eso sí, adoré muchas cosas, especialmente que incorporaron CITAS TEXTUALES de la obra de Shirley (casi todo lo que narra Steven al final está calcado del libro. Kudos por eso) e incluyen un montón de pequeñas cosas que hacen latir contento tu corazoncito de lector friki (me resultó especialmente interesante que utilizaron mucho del libro, especialmente del personaje de Eleanor, para construir a Liv. Fue un win. Quedó bárbaro, le da la magia que el personaje necesita).
No crean que todo es color de rosas, en lo personal sentí que algunas cosas se me escapaban o necesitaban pulirse más (detalles, más que nada). También es predecible, por ejemplo, de entrada imaginé la identidad de la mujer del cuello roto. ¿Es menos devastadora la revelación? No. Pero me pareció cantado. Me pasó lo mismo con el último plot twist, era muy obvio, ¿no? Finalmente, con honestidad, algunas cosas me parecieron de mal gusto. Pero esto último es subjetivo, entiendo que son cosas típicas de las producciones de terror. Que a mí no me gusten es otro cantar que no hace a la serie.
La estética y fotografía es increíble, todo muy cuidado y estético. Más allá de los horrores. La atmosfera está muy bien lograda, te transmite exactamente lo que la escena debe transmitirte. Además, dos cosas geniales: 1) el episodio 6 se rodó con cinco planos secuencia, uno de casi 20 minutos. Una locura absoluta y quedó impecable. Me voló el cerebro, una vez más. Busquen cómo se filmó, por favor, y se los va a volar a ustedes también. Por locuras como esa alguna vez estudié cine.
y 2) la serie está llena de easter eggs, de fantasmas escondidos en los episodios lo que hace que todo sea mucho, mucho más creepy. Yo solo encontré los más obvios, lo admito. Y uno (las manos bajo el piano) creo que fue el que más me impactó.
El final me gustó, tiene una vibra muy clásica, muy conciliadora y emocionante. Apela a la emoción. Muy de producciones de los noventa onda, no sé, Casper.
Y para mí esto es genial, ya que al final esta es una historia de amor. Una historia de redención y perdón. Y no solo sobre perdonar al otro, sino también a nosotros mismos, a aprender a vivir con nuestros fantasmas, y no solo con aquellos espectros que pueblan los pasillos y las escaleras de Hill House.
Una gran serie, de una calidad y un impacto increíbles.
Hermosa. Es hermosa.
Si no la vieron, corran ya.
Yo no soy buen parámetro, ya que estoy muerta por dentro y rara vez una historia de terror me asusta, pero no me pareció tan terrorífica. Al contrario, al igual que el libro, no sentí que se limitara a sustos burdos y screamers, a solo pretender asustar, sino que el terror es un vehículo para llegar a algo más profundo. A algo más emocional y psicológico.
Sí, tiene sustos. Pero es más que eso. Mucho más que eso.
Los fantasmas en esta nueva versión de Hill House no solo son espectros, la culpa, el remordimiento, la soledad, el resentimiento, la locura y la muerte son monstruos mucho más aterradores y con un protagonismo mucho más voraz.
Así que sí, una aparición repentina va a incomodarte y darte palpitaciones, pero al final del día es la suma de todas aquellas sensaciones que ponen a nuestra condición humana sobre la mesa, la que hace mella, la que te provoca sentimientos muy intensos, angustia, conmoción. La que te hace pensar, la que te apela y te conmueve. Y es eso lo que hace a esta serie tan grandiosa.
La trama es genial y está muy bien pensada. No solo entremezcla pasado y futuro de una manera impactante que te mantiene siempre al borde de la silla y te eriza los pelos, sino que al final todo se conecta de una forma magistral. Esto último me voló el cerebro, es increíble lo bien que la pensaron, como todo se acopla. Te deja patitieso y sin poder creerlo. Muchas de las apariciones de Hill House tienen una respuesta, una explicación, y realmente, realmente me encanta. Un flash absoluto.
En lo personal, la serie me causó más angustia que miedo. Y por angustia lean: lloré como condenada del episodio dos al diez. Sin parar. Me resultó muy, muy, muy emocional. Me destruyó, tocó muchas fibras sensibles en mí y a la vez no podía sentir más que empatía por uno y cada uno de los Crain.
Tiene momentos muy intensos a nivel emocional. Increíble (la escena de Theo y Shirley en el auto está en mi top ten de mejores escenas del cine y la tv, de lo mucho que me pegó).
Las actuaciones me gustaron mucho todas. Realmente tiene un cast excelente (y hot as fuck, hay que decirlo).
Si tuviera que elegir, destaco a Carla Gugino, quien interpreta a Liv, la mamá de los Crain y... reina absoluta. Su interpretación es esplendida, desesperante y triste. La adoré.
También me gustaron mucho, pero mucho Elizabeth Reazer, que interpreta a Shirley, la hermana mayor y, aunque pueda ser una elección rara, Timothy Hutton, quien interpreta a Hugh Crain de grande. Me vi reflejada en ambos y me encantaron sus interpretaciones. Especialmente la de él, me resultó desgarradora y muy conmovedora.
Pero, reitero, un cast brillante. El favoritismo pasa por una cuestión de afinidad no de calidad. Todos son excelentes, todos se lucen. Los amé a todos. Pero a todos.
Sobre la trama, no es una adaptación del libro, sino que está basada y toma elementos. Pero es una historia distinta. Eso sí, adoré muchas cosas, especialmente que incorporaron CITAS TEXTUALES de la obra de Shirley (casi todo lo que narra Steven al final está calcado del libro. Kudos por eso) e incluyen un montón de pequeñas cosas que hacen latir contento tu corazoncito de lector friki (me resultó especialmente interesante que utilizaron mucho del libro, especialmente del personaje de Eleanor, para construir a Liv. Fue un win. Quedó bárbaro, le da la magia que el personaje necesita).
No crean que todo es color de rosas, en lo personal sentí que algunas cosas se me escapaban o necesitaban pulirse más (detalles, más que nada). También es predecible, por ejemplo, de entrada imaginé la identidad de la mujer del cuello roto. ¿Es menos devastadora la revelación? No. Pero me pareció cantado. Me pasó lo mismo con el último plot twist, era muy obvio, ¿no? Finalmente, con honestidad, algunas cosas me parecieron de mal gusto. Pero esto último es subjetivo, entiendo que son cosas típicas de las producciones de terror. Que a mí no me gusten es otro cantar que no hace a la serie.
La estética y fotografía es increíble, todo muy cuidado y estético. Más allá de los horrores. La atmosfera está muy bien lograda, te transmite exactamente lo que la escena debe transmitirte. Además, dos cosas geniales: 1) el episodio 6 se rodó con cinco planos secuencia, uno de casi 20 minutos. Una locura absoluta y quedó impecable. Me voló el cerebro, una vez más. Busquen cómo se filmó, por favor, y se los va a volar a ustedes también. Por locuras como esa alguna vez estudié cine.
y 2) la serie está llena de easter eggs, de fantasmas escondidos en los episodios lo que hace que todo sea mucho, mucho más creepy. Yo solo encontré los más obvios, lo admito. Y uno (las manos bajo el piano) creo que fue el que más me impactó.
El final me gustó, tiene una vibra muy clásica, muy conciliadora y emocionante. Apela a la emoción. Muy de producciones de los noventa onda, no sé, Casper.
Y para mí esto es genial, ya que al final esta es una historia de amor. Una historia de redención y perdón. Y no solo sobre perdonar al otro, sino también a nosotros mismos, a aprender a vivir con nuestros fantasmas, y no solo con aquellos espectros que pueblan los pasillos y las escaleras de Hill House.
Una gran serie, de una calidad y un impacto increíbles.
Hermosa. Es hermosa.
Si no la vieron, corran ya.
¡¡¡FELICES 12 NOCHES DE HALLOWEEN!!! :D
Hola Meli! Yo la empecé porque vi el trailer y me había llamado la atención, sin realmente saber en su momento que la calificaban de terror porque la verdad que a mí tampoco me pareció tan de terror. Es más un drama familiar con elementos sobrenaturales que terror en sí. Por más que tiene sustos y saltos, me angustió más de lo que me causó miedo, pero me pareció excelentemente filmada, actuada, ejecutada y escrita. Es genial cómo todo se relaciona con todo para cuando llegás al final. Los personajes se hacen querer y sin que te des cuenta te encariñas muchísimo. El episodio 6 me fascinó cómo está filmado, es una obra maestra.
ResponderEliminarMe enganchó sin querer, me vi 8 episodios en un día y no la vi entera porque tenía un compromiso jajaja
Me encantó la reseña! Te leo :D