Una apasionante saga de tres familias que se desarrolla en dos tramas paralelas, una situada en el Miami actual, y la otra que se inicia en los años 1850 en torno a tres familias distintas de China, España y África que emigrarán a Cuba.

Para huir de su soledad en Miami, Cecilia se refugia en un bar donde conoce a una misteriosa anciana. Tras ese primer encuentro, regresará al bar cada noche para escuchar de labios de la mujer tres historias que se habían iniciado, más de un siglo atrás, en otros tantos lugares del mundo: un suicidio en China que desata una cadena de reacciones familiares; una extraña maldición que persigue a las mujeres de una familia española, y una joven arrancada de su hogar en la costa africana, que es llevada a un mundo desconocido. Las peripecias de estos personajes se irán entrelazando a lo largo del tiempo, desde una Cuba bajo el dominio español hasta nuestros días. Los amores predestinados y fulminantes de ese pasado cobrarán renovada fuerza en Cecilia, atada emocionalmente a su Habana natal, pero obsesionada también por cierto enigma que intenta resolver.

La isla de los amores infinitos es una saga familiar e histórica, con muchas lecturas y un ambiente cargado de misterios. El amor y el más allá son los hilos conductores de esta novela donde los sentimientos pueden sobrevivir a la muerte. Una maravillosa historia de esperanzas y sueños rotos, llena de magia.

Este libro llegó a mí por error, y fue un error maravilloso.

Cuando me di cuenta que había comprado un libro creyendo que era otro que no tenía absolutamente nada que ver ni el más remoto parecido, no supe qué sentir, fuera de dudar de mi inteligencia (porque es imposible confundir los libros como los confundí). Pero bastó con comenzar a leer para saber que había sido un error afortunado.

La isla de los amores infinitos es realismo mágico en su estado más puro. Lo amé profundamente.

Al comienzo, nos narra cinco historias en paralelo que parecen no tener relación alguna, pero que la autora entreteje con maestría, revelando que cuatro de aquellas historias son los pilares del destino de la protagonista. Es bellísimo y muy emocionante:

Cecilia está deprimida porque ama, odia y extraña su Cuba natal. En un bar de Miami, se encuentra con una anciana que comienza a contarle la historia de su vida, pero no se limita a eso. También le cuenta la de una joven china que tras la explosión de la guerra, sigue a su esposo a Cuba. La de una pequeña africana que es vendida como esclava y termina sirviendo en una casa cubana, hasta que es liberada y comienza una nueva y trágica vida en la famosa isla. Por último, también le cuenta de una jovencita española, que lleva en su sangre un don que se pasa de generación en generación: todas las mujeres de su familia, inclusive las mujeres políticas, son capaces de ver un travieso duendecillo. Por supuesto, esta joven también acaba en Cuba.

Pero, la vida de Cecilia no está libre de misterios, hay una casa, una casa fantasma que se le aparece a determinadas personas y les permite ver, brevemente, a sus habitantes. Cecilia está escribiendo un artículo sobre el tema sin saber que aquella casa fantasmagórica que aparece y desaparece, está estrechamente vinculada a ella y a su agridulce Cuba.

Más allá de todos los elementos mágicos, que créanme, son excelentes, muy bien trabajados, con mucho simbolismo y sentimiento; amé mucho, mucho, mucho toda la información que brinda sobre Cuba.

Personalmente, quitando aquellas particularidades políticas que todos conocemos porque son de cultura general, sabía muy, muy poco sobre la historia de este país, sobre sus origines y me pareció extremadamente interesante informarme, sobre todo porque la autora no nos da una clase de historia, si no que convierte a la historia en parte de su libro. Muy ágil y llevadero, muy enriquecedor.

Es un libro muy sentido, con muchas emociones. Tiene esa nostalgia linda del realismo mágico, tiene romance y mucha belleza. Pero es a la vez crudo, y aborda temas profundos e importantes, como la revolución (infaltable) o la soledad.

El estilo de la autora, impecable. Sumamente estético. Una lectura que engancha desde el primer momento y se hace difícil de soltar. Lo disfruté de principio a fin, te provoca todo tipo de emociones, realmente es un libro precioso, duro, pero inigualable.

Te deja sonriendo, pero con el corazón machucado e incluso con algunas lágrimas agridulces en los ojos, mezcla de felicidad por tan bonito final y de desazón por todas las cosas que ocurren para llegar a él. Te deja sorprendido de cómo funciona el destino, e incluso pensando y reflexionando sobre el tema.

Una de mis lecturas favoritas de este año.

Lisa y llanamente maravilloso.